Transparencia con autonomía
Pide comisionada cuidar avances. Ven prioritario, ante la extinción del Info, no volver al control total del Ejecutivo.
Bernardo Uribe.
Reforma, Ciudad
Ante la inminente reconfiguración que tendrá el Instituto de Transparencia y Protección de Datos Personales de la Ciudad de México (Info CDMX), la resolución de quejas de inconformidad con independencia debe garantizarse.
Así lo expresó la comisionada de este organismo, María del Carmen Nava.
Con la publicación en el Diario Oficial de la Federación de una nueva ley sobre la materia, el 20 de marzo se formalizó la extinción, a nivel federal, del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
Y se dio un plazo de 90 días a los congresos locales para adecuar sus legislaciones y contar con una estructura nueva.
Para Nava, la Capital tiene la oportunidad de dotar la institución que sustituya al Info de una estructura que mantenga la rendición de cuentas por peticiones ciudadanas.
«Ejercer el federalismo que se tiene, que implica el poder tomar las determinaciones que mejor favorezca a la ciudadanía y que se aleje del modelo del resto del País, que pone al centro a los titulares de los poderes ejecutivos, lo cual compromete a la rendición de cuentas», aseguró.
«El Info CDMX sí tiene una vigencia y esto se determinó desde las leyes generales, pero los diputados ahora tienen la oportunidad de que esta nueva institución siga siendo colegiada para darle mayor libertad y poder construir confianza en la transparencia«.
Aunque la Ley General detalla que los ejecutivos locales tienen que ser los encargados de la integración de los organizadores de transparencia, agregó, en la Ciudad existen condiciones para que se respete una cierta autonomía.
«Mi propuesta teórica-académica es que las designaciones podrían incluso pasar por el mismo Congreso, de tal manera que no fuera por instrucción de Jefatura de Gobierno, ya que el acceso a la información repercute en obligaciones para otros poderes», planteó.
«No se pueden suscribir ni rendir cuentas a uno solo, porque ahí estaríamos hablando de una reforma presidencialista al 100 por ciento».
La comisionada celebró que el debate alrededor del futuro de la transparencia en la Capital esté encontrando en el Legislativo un espacio de escucha y de consenso, contrario a la experiencia federal, donde se ignoró la opinión de especialistas.
«Es una señal afortunada el que, en este caso, la Legislatura tenga la posibilidad de escuchar lo que tendría que aportar el Info», afirmó.
«Aunque el mayor temor en este reto de ejercer el parlamento abierto es que legisladoras y legisladores siempre lo han asociado con tener foros, pero el parlamento no son foros ni son mesas, es una forma de actuar transparente, con integridad, con rendición de cuentas, e incluso de difusión».