Me gustaría adelantar que mi voto sobre el proyecto de acuerdo del Programa Operativo Anual 2023 será a favor. Como cada año lo he referido, en ocasión de la discusión de los proyectos de programas operativos anuales correspondientes, nuestra ley local de transparencia dispone, en su artículo 49, una base mínima para el presupuesto que se debería asignar al Instituto, con el fin de que realice las funciones que le han sido encomendadas. No obstante, vemos que año con año, se otorgan cada vez menos recursos al Instituto. El presupuesto asignado a este Instituto para 2023 representa menos del 0.06% del monto total previsto por el Decreto del presupuesto de Egresos de la Ciudad de México para este año. Así que, de entrada, partimos de contar con menos recursos de los que la propia ley establece.
Esto, en un contexto en el que el número de solicitudes de acceso a la información ha mostrado recuperar su tendencia creciente, luego de reanudarse las actividades presenciales tras la contingencia provocada por la COVID-19. Y, con ese crecimiento, ha crecido también el número de recursos de revisión que las personas presentan a este Instituto. También el número de denuncias interpuestas por vacíos de información pública se ha incrementado en 80%. Entonces, en los hechos, las cargas de trabajo del Instituto han aumentado, pero el presupuesto asignado se ha reducido.
Esta situación representa un gran reto para el Instituto, dado que trabajará con menos recursos, prácticamente con la misma cantidad de personas, con los mismos sueldos, pese al impacto inflacionario.
A manera de ejemplo, el área del Instituto a cuyo trabajo doy seguimiento directo, la Dirección de Estado Abierto, Estudios y Evaluación, responsable directa del proceso de verificación censal y periódico del cumplimiento de obligaciones de transparencia de los sujetos obligados de esta Ciudad, así como de dictaminar las denuncias por vacíos de información, se le asigna este año la cantidad de $508,038.91 m.n. Este monto representa 5.5% menos de lo que esta Dirección tuvo como presupuesto el año pasado.
Desde esta área del Instituto, adicionalmente, realizamos estudios aplicados, ejercicios de cocreación, de apertura institucional, difusión de deberes en materia de transparencia proactiva; asimismo, apoyamos la difusión del derecho de acceso a la información entre poblaciones en situación de vulnerabilidad. Y pese a las presentes restricciones presupuestales, continuaremos comprometidas con generar resultados con los recursos de que disponemos. Y ello incluye también por el cabal aprovechamiento, con responsabilidad, del tiempo de las personas que colaboran con nosotras y están bajo nuestra coordinación.
Agradecidas con la oportunidad de hacerlo, cada semana seguiremos presentando a este Pleno los resultados alcanzados, pues los resultados en sus diversas áreas son también una aportación del Instituto al trabajo del Sistema Nacional de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales.
